Un cuento para Don Kenn | Reto de Escritura

<<Los llamamos fenómenos, creímos que ellos serían el espectáculo, creímos que reiríamos y pasaríamos un buen rato... mas compramos los boletos equivocados, nos ubicamos en la parte equivocada de la carpa>> 

Hace una semana aproximadamente leí en el blog de Karen (sindrome Da Vinci) algo que me llamó mucho la atención y se títulaba igual que esta entrada:  "Un cuento para Don Kenn" (Yo robé el título)

En su blog, Karen nos plantea un reto: escribir un microrelato inspirado en alguno de los trabajos de Jhon Kenn, y en este momento tal vez deben estar pensando lo mismo que pensé yo la primera vez que escuché su nombre: ¿Quién es Jhon Kenn?, pues comencemos con eso.

John Kenn Mortensen (Dinamarca 1978): guionista, animador y director de programas televisivos infantiles de día; ilustrador de monstruos, fantasmas y demonios de noche. Un tipo entregado a la bipolaridad, sin duda.

Don Kenn es un artista que mediante post it, lapices y talento, plasma en el papel nuestras peores pesadillas. Honestamente, yo no tenía ni el más mínimo conocimiento sobre él o sobre su trabajo antes de leer sobre el reto literario, y realmente me sorprendí mucho al ver sus ilustraciones... tan tetrícas y... perturbadoras (hola Dross). Debo admitir que luego de un par de fotos quedé totalmente interesada en su arte, sus mounstruos y las diferentes interpretaciones que todo el mundo (incluyendome) les da. Es por eso que decidí aceptar el reto e intentar expresar algunas de las historias que imaginé al ver los dibujos:

(Este no fue mi favorito, pero quise incluirlo en mi entrada de todas formas porque le agarré un poco de cariño...)

Bien.

Éramos diferentes, todo el mundo lo sabía, yo lo sabía.

Durante generaciones a nadie pareció importarle, todos parecían estar acostumbrados, todos parecían estar conformes con eso, pero yo no.

<<¿Es normal que el tiempo pase? ¿Es normal que cada día todo esté peor? ¿Es normal que solo yo lo note?... de todas formas, ¿Qué es normal?>> me preguntaba siempre.

Durante esos años, en la escuela, solían decirme que nuestras acciones serían las pruebas al momento de definirnos, que actuáramos bien para ser reconocidos por aquello, que actuáramos con justicia para que con justicia nos juzgaran. Pero hubo algo más que yo quise saber; “¿Cómo luce el bien?” le pregunté a mi maestra. Ella pensó su respuesta por algunos segundos y concluyó sonriendo: “Bueno, no tiene pinta de monstruo, por su puesto”. Y todo el salón rió.

Recuerdo que aquel día llegué de la escuela sin saber con exactitud qué era el "bien" ni que era un "monstruo", pero que al mirar las fotografías que mi madre solía colgar en nuestra sala de estar, decidí no intentar averiguarlo nunca más. No volví a preguntarme quiénes eran los verdaderos monstruos , ni qué tan cerca estaban.

 Depresión.

-No, doctor. Sigue allí. 

-mmm... - musitó el hombre de bata blanca mientras tomaba nota en su tableta - ¿Y aun siente que le “pesa"?

-Me hunde, doctor. - respondió el hombre mirando al vació

-Ya veo.. ¿Sigue tomando los medicamentos que le receté? -preguntó con un tono que rosaba por la indiferencia.

-Sí, aunque no logro entender para qué los necesito, yo no estoy enfermo.

<<Eso creen todos>>, pensó el doctor.

 pues su cuerpo parece estarlo. - Le explicó - ¿Cuándo fue la última vez que durmió?

-Hace un par de días.

-¿La última vez que comió? 

-No lo recuerdo. 

-¿Ha salido con alguien durante la última semana?

-Lo hubiera hecho, si él me dejara tranquilo... - 

-¿él? - se extrañó - Cuénteme, Señor Kenn - le pidió mirando al hombre a los ojos por primera vez desde que este entró a su consulta.  - ¿Quién es "él"? 

-él. - Respondió a secas y se tocó el hombro con su mano -¿Es acaso usted ciego? - le preguntó subiendo su tono - ¡¿Es acaso usted sordo?! ¡¿Cómo es posible que no lo haya escuchado?! ¡él no se ha callado durante toda la consulta!... él nunca ha guardado silencio... - concluyó casi susurrando, mientras se encogía de hombros. Hundiéndose.

Por un momento, el Doctor, perturbado por el raro cambio de actitud de su paciente, creyó sentir algo. Creyó ver algo. Creyó estar seguro de que algo estaba allí, justo detrás de ese escuálido hombre. Presionándolo. <<Mierda>> pensó <<No debería atender la consulta después de beber>>. 

y, mientras movía su cabeza lado a lado, negándose a la efímera imagen que creía haber visto, tachó la palabra "Depresión" de la hoja de vida del señor Kenn, y sobre ella escribió con una letra tajante: "Esquizofrenia" 

-pobre loco - susurró el doctor mientras su paciente se distraía mirando sobre su hombro, a la "nada".

En fin, ¿No les parecen interesantes las ilustraciones de Kenn? si gustan de saber más sobre él les facilito sus redes sociales para que puedan buscarlo :-) : 

Instragram | tumblr | twitter.

No olviden visitar el blog Síndrome da Vinci y anímense a ser parte de este reto literario, es realmente muy curioso todas las historias que se pueden extraer de estos monstruos... 

Nos vemos...